#OperacionPalace: simplemente genial

24.02.2014 00:00

El enfado generalizado del público que ayer vio el programa de Jordi Évole era tal, que las redes sociales echaban humo durante toda la noche del domingo y mañana del lunes. Hay que destacar, también, que no todos nos enfadamos con ello. Los que nos dedicamos a la comunicación y entendemos la comunicación de masas, sus estudios sociológicos y como un medio de comunicación puede ser capaz de encabezar cualquier camino hacia un lugar ¿qué lugar? ese es otro debate.

El programa, anunciado a "bombo y platillo" por el grupo ATRESMEDIA, vendía a la audiencia un espacio con "toda la verdad" sobre el 23-F, bajo el nombre de #OperacionPalace (Operación Palace para los que no son tuiteros). La espectación fue tal que se convirtió en Trending Topic desde su inicio, llegando a ser tendencia mundial en RRSS.

Desde que empecé a ver Operación Palace había cosas que no me cuadraban, aunque no voy a entrar en esos detalles, ya que este artículo no lo escribo para hablar del contenido, sino del continente, es decir, del estudio sociológico que realizó La Sexta con Jordi Évole como cabeza visible. Viniendo del conocido como "El Follonero", no me extrañaba cualquier cosa, ya que aunque me gustan sus programas y su forma de hacer periodismo (no todo), siempre espero alguna "bomba" o algo diferente por parte del autor, al que veo en la pantalla descubriendo todas las "intimidades" de un político, pero recordando su paso por el programa Buenafuente.

Se puede considerar que el enfoque que se le da a este análisis es un enfoque conductista, el cual procede de la psicología y la vertiente sociológica y el área de interés es la conducta humana y los usos y efectos de los medios, utilizando una metodología basada en los experimentos. Con esto quiero decir que todo es relativo y se hablará de estafa o magnífico programa según se quiera mirar.

Desde el principio anunciaban que una gran sorpresa acompañaría la emisión del programa, lo que hizo que la expectación aumentara considerablemente. Lo que nadie se esperaba era que esa sorpresa fuese la difusión de un programa televisivo "manipulando" una ¿verdad? sobre lo que aconteció aquel día en el Congreso de los Diputados.

Pero la pregunta es la siguiente: ¿Cuál es la verdad de todo aquello? ¿Qué ocurrió realmente? ¿Tenemos derecho a saberlo?

El propio Évole salió a la palestra diciendo en su cuenta de Twitter que todo era mentira, que había sido una manipulación y que "otros mienten y no lo dicen". Muchos se enfadaron, pero lo cierto es que mi enfado no puede ser con el periodista en cuestión, para nada, mi enfado es con todas las personas que nos han manipulado de verdad durante tantos años. Contra todas esas personas que saben qué pasó y que no han salido a decirnos la verdad. Contra todo lo que se manipula, tanto en medios de comunicación como en la política.

Jordi Évole ha realizado un programa de televisión que marcará un antes y un después en este país, por lo menos para los que nos dedicamos a esto. Ya verán como en algunas asignaturas de comunicación, como puede ser Teoría de la Comunicación, saldrá este fenómeno sociológico, porque, aunque mucha gente esté enfadada, es lo que realmente pasa en esta sociedad, una sociedad manipulada por las versiones que no corresponden a los hechos, ya que pocos conocen lo que allí sucedió y esos pocos "no saben, no contestan".

Desde aquí, gracias al grupo ATRESMEDIA, a La Sexta y a Jordi Évole por realizar este estudio sociológico, por hacerme comprender mucho mejor la asignatura de Teoría de la Comunicación, que felizmente aprobé y que me enseñó Graciela Padilla, profesora de la Universidad Internacional de La Rioja.

Podemos enfadarnos si queremos, pero el enfado no debe ser con este programa que nos ha hecho darnos cuenta, por lo menos a mí, de cómo nos manipulan día tras día con hechos como este, además de demostrar el miedo social que existe a la hora de hablar de la monarquía y de algunos hechos históricos. ¿Acaso nos hemos enfadado con la monarquía, Guardia Civil o políticos involucrados por mentirnos sobre este hecho?